INMOLACION ABORTADA...

Miércoles 24 Julio 2013.

                                                    INMOLACIÓN ABORTADA...

Siempre nos quedará la duda. Pero lo que es evidente es que, ¡por fin! había alguien dispuesto a anteponer la dignidad, por encima de otras consideraciones. En varias ocasiones y en algunas, incluso, he llegado a pedirle que se vaya, he atacado el modo de "no hacer" de Alfredo Pérez Rubalcaba, pero éste su gesto, que estaba dispuesto a llevar a cabo, de plantear una Moción de Censura, me ha reconciliado con él y con el personaje que conocí, hace ya muchos años y que creía haber perdido.

Y es que, en efecto, ha estado dispuesto a inmolarse por la dignidad de la Democracia y por ende del Parlamento. Porque eso, y no otra cosa, es lo que hubiera significado su gesto: Una inmolación. El sabía, como lo sabíamos todos, que iba a ser, como se suele decir, pasado "por la piedra" y que sus oponentes iban a poner en marcha el ventilador y airear con el toda la "mierda" cierta o inventada  que rodea y ha rodeado siempre al personaje.

No quería o al menos así lo veo yo, ofrecerse como opción a nada...quería, simplemente, ejercer de hurón en la conejera del Partido Popular y lograr que el "Conejo"más huidizo que se ha dado en España, saliera, por fin, de su madriguera. No sé si muchos de vosotros conocéis la caza con hurón. Yo la vi muchas veces y no me gusta, aunque comprenda su eficacia. El hurón, un roedor largo y feo, se introduce por una de las bocas de la madriguera en la que se cobijan los conejos, que a su vez está rodeada de "cazadores", yo nunca les llamé así, con sus escopetas preparadas. Cuando los pobres conejillos se sienten amenazados por el depredador animal salen en desbandada, las escopetas echan humo  y en unos minutos el campo es una siembra de cadáveres...hasta en alguna ocasión se dio el caso de que el cadáver del hurón apareciera entre los de sus presas.

Y esto es lo que, lisa y llanamente, quería Rubalcaba, aun sabiendo que iba a ser presa fácil para las escopetas de los "cazadores", ser el hurón que, jugándose su cabeza, se inmolaba, en un rasgo que le honra, con tal de que el Marianico apareciera por el Parlamento, cosa que, según se anuncia, se producirá el próximo día uno de Agosto.

Aunque a decir verdad yo no espero nada o casi nada de su comparecencia. Le sobra cinismo y cara de cemento como para seguir haciéndonos tragar su verdad, como lo viene haciendo desde el aciago momento en el que todos sus "fieles" y un montón de equivocados, le dieron el cargo que, para los demás, es carga.

¡Ah! Y que conste, no me gusta el Marianico ni la caza con hurón; el primero porque es un redomado cínico y lo segundo porque no me gusta nada aquello que se hace a traición.