MI GRITO HOY NO ES GRITO: ¡ES RUGIDO!

¿Y que hacer en este caso? ¿Pedir justicia? Y que clase de justicia, grito yo, habría que inventar para que estos ¿seres? pagaran su culpa. No se, tampoco la noticia ha aclarado mucho, si la "salvajada" llegó o no a producirse, aunque la verdad es que tampoco me importa mucho. No tengo interés alguno en añadir este, como un jalón más, en la larga lista de disparates humanos, es más, ni creo que lleguen a poder figurar en ningún caso, como "algo" a tratar entre bimanos.
La reiterada repetición de la noticia me ha hecho saber, casi sin quererlo, que la pareja de salvajes y que me perdonen los pobres, de verdad, salvajes, son de Sevilla, ¡que tristeza para los Andaluces!, y que para mayor inri sus mujeres, madres de las niñas, consentían en el intercambio y esto llena ya, por completo los niveles de mi comprensión: no solo son desnaturalizados los padres, si no que también, y esto es aun más fuerte, lo son las madres. Veinte años de cárcel para los unos y diez para las otras, pide, como pena, el Fiscal y con eso, suponiendo que lo cumplan, han pagado su castigo...han pagado ¿a quien? a la sociedad y las niñas ¡que! a vivir los años que les otorgue la vida con sus mentes manchadas de angustia y asco. Si, ya se, estoy contra la pena de muerte, pero no hay otras penas que, sin muerte, pervivan de por siempre en las mentes de esos individuos. Algo que, sin quitar vida sea como un continuo repicar en sus obnubilados cerebros.

Creo, al menos eso he oído decir, que los reclusos rechazan e incluso castigan a lo violadores. En este caso, el delito es de por sí tan refinado, que aunque no llegara a consumarse la violación, por solo hecho de idearla, ya debieran recibir un castigo tan maquiavélico como el que ellos concibieron.
¿Duro en mis comentarios? a lo mejor, pero todavía me parece poco para lo que semejantes energúmenos se merecen...En cuanto a las madres, mejor no opino. No tengo gana alguna de manchar el nombre de tantas madres mencionándolas de ese modo...ellas, esas, no lo merecen.
¡Ah! y que conste que entes que comentar hechos como este, prefiero hablar del Marianico que, aunque también de pena, siempre da más risa.
No existen palabras para calificar esto.
ResponderEliminarEn verdad que es una de cosas más duras sobre las que he escrito. He conocido "salvajadas", pero en caliente; así, en frio, y como hicieron estos no lo había vito. No hay pena suficiente para su delito.
Eliminar