¡QUE VUELVE AZNAR! ¡MADRE MIA, QUE NUBE!

Sábado 25 Mayo 2013.

                                ¡QUE VUELVE AZNAR, MADRE MÍA, QUE NUBE.

Seguro estoy de que no me pondrán en esa disyuntiva, de tener que elegir entre El Marianico y El José Mari, pero si alguien me lo propusiera, sin duda, me quedaría con el primero que al menos, aunque cínico y mentiroso, no es tan prepotente como el otro, el cual circula por el mundo como un "salva patrias" de vía estrecha, al que todo el mundo parece deberle algo.

No me gustó nada cuando estuvo en la oposición, en la que, como hiciera posteriormente su sucesor, no le importó recurrir a la mentira y al insulto, con tal de conseguir sus objetivos y aunque este modo de "operar" sea muy de "derechas" el lo llevó a la cima de la afrenta, con un solo logro "exitoso", ¡El váyase Sr. González!, que, como Publicitario que soy, no tengo más remedio que reconocer que fue un verdadero hallazgo.

Una vez en la Presidencia, con el dio comienzo la "Era del Ladrillo" y el "Éxito del Pelotazo", que se lo pregunten, si no, a su compañero de pupitre, flamante Presidente de una Telefónica Privatizada, en beneficio, el sabría de quien. Ahora, eso si, supo plegar a sus huestes a los designios de su "libreta encantada" y colocó en los puestos claves de los medios de comunicación a sus colaboradores más afines, hasta el punto de que la propia Televisión estatal llegó con su parcialidad a avergonzar a quienes, de un modo o de otro, vivíamos de oficio de la Publicidad..Allí imperaba Ernesto Sáez de Buruaga y, para rematar la faena, siempre a su lado, el fiel peón de confianzas, el amigo Urdaci. Ellos, desde Televisión ¿Española? y otros peones de brega, desde "casi" todos los medios que por aquel entonces se publicaban, dieron a José Mari la victoria absoluta, que, en verdad, nadie le negó. Las urnas lo decidieron y como siempre que toman una decisión de ese calado, bien lo pagamos los de siempre.

Que José Mari era y es un hombre que supo manejar los Medios de Comunicación, como pocos en este  país, eso no se la va a negar nadie y si no, ahí están sus fotografías de los "Tres de las Azores", su echar el brazo sobre la espalda del presidente norte americano o dejar posar su elegante zapato sobre la mesa de su anfitrión...Y en el colmo de su egolatría de comunicación, la "concesión" de aquella Medalla del Congreso Americano, cuya verdadera historia es posible que nunca sepamos.

Ahora, que ocupa un cargo, mas o menos "honorífico", en uno de los Grupos de Comunicación más poderosos del mundo y que desde la FAES sigue dictando consignas para el camino, amenaza con volver. Es que le debemos algo o es tan engreído que se cree capaz de solucionar lo que su sucesor a dedo esta emborronando.

¡Ah! Y que conste, me limito a emitir una opinión con la que no pretendo atacar, como siempre, digo nada más.