CARLOS FLORIANO, EL ENCORBATADO.
La verdad es que son muchos los vocingleros que han desfilado por la galería de "mastines" ilustres en el Partido Popular, pero hay especialmente dos que despertaron mi atención; el uno el "guaperas" de Gonzalez Pons, al que ya dediqué, creo recordar, algún comentario en uno de "Mis Gritos" y el otro el encorbatado Carlos Floriano, con cuyas "perlas" espero divertirme hoy, a la vez que les llevo a ustedes una parte de ese divertimiento. Si consigo arrancarles una sonrisa eso habremos adelantado, lo cual no es poco, teniendo en cuenta de quien se trata y quien alimenta la verborrea de la que hace gala.
Por si hubiera sido poco su "lucimiento" en la "numantina" defensa que en días anteriores hizo, apoyando a uno de sus Presidentes, Jesús Posada, ya que hombres tan importantes como él, tienen hasta dos o más presidentes, un día o dos después, sin descansar "ni beber agua", tuvo la deferencia de obsequiarnos con nuevas perlas de su muy variado repertorio. Ese día, en el que él y el "Posadas" aunaron sus fuerzas para negar una Comisión de Investigación sobre el caso Bárcenas o la posibilidad del interpelar al Marianico sobre el mismo tema, la agudeza de su ingenio le llevó a acusar a los socialistas de las mismas cosas de las que se les estaba acusando a ellos y, además, sobre el mismo tema y con el mismo elemento como "hilo" conductor, el tal Bárcenas, del cual se van a aprender el nombre hasta los niños en las escuelas, para hacer más "ilustrativa" la desternillante Ley de Educación del ínclito Sr. Wert. En ese día llegué a creer, en serio, que el Florianin había llegado al cenit.
Pero no fue así, ya que, como queda dicho, un día o dos después volvió a poner la agilidad de su verbo al servicio de sus farragosos pensamientos, los cuales, por otra parte, no sabemos si son suyos o si se los dictan sus "amos". Muy ofendido por el hecho de que Rubalcaba hubiera publicado sus declaraciones de la renta y estas mostraran unos ingresos muy inferiores a los de su "Amo" supremo, quiso demostrarnos que en el hipotético caso de que los dos personajes hubieran seguido sus profesiones particulares, el Marianico, Registrador la Propiedad, hubiera generado muchos más ingresos que Rubalcaba como Químico, o Catedrático de Química...¡toma ya! no querían ustedes "perlas", pues hay tienen para hacer un rosario. Si las comparaciones, dicen, suelen ser odiosas, lo son más en este caso, en el que todo el mundo sabe las diferencias existentes entre ambas profesiones y el trabajo que requiere su dedicación a las mismas, ya que mientras los miembros de la primera, he conocido muchos Registradores, se limitan a firmar lo que sus oficiales le presentan, los Quimicos se suelen dejar sus pestañas en los Laboratorios...¿que los Registradores ganan más? eso no demuestra nada más que cuales son las metas iniciales de cada uno de ellos, por no hablar de lo injusto de las cosas.
Y el caso es que nuestro personaje , el encorbatado Carlos Floriano, para mí, desde hoy, el Florianin, iba de "chico listo", licenciado y doctor en Derecho, terminó la carrera con varios premios extraordinarios y matriculas de honor en su historial académico, aunque, siguiendo su ejecutoria, más le hubiera valido seguir con sus Carreras que adentrarse en los vericuetos de la política, ya que en ella, como es evidente, no ha cosechado nada más que fracasos: Derrotado, en su tierra extremeña, en las ocasiones en las que optó a la presidencia de la Comunidad, logró, por fin su acta de Diputado, desde la cual su Partido le aupó a la meritoria tarea de hacer el ridículo, tanto en nombre propio como en el de su formación...Posee, eso si, un aguerrido sentido de su misión y lo luce en cuantas ocasiones tiene oportunidad. Tarea que comparte con sus compañeros militantes del Partido Popular, Gonzalez Pons y Hernando, llegando, en ocasiones, a un autentico pugilato por saber quien dice la "chorrada" más gorda.
¡Ah! Y que conste, a mi personalmente los tres personajes citados me caen bien y me dan, a la vez ocasión, de divertirme escribiendo sobre los mismos...de animadversión nada, simpatía y además de la buena...¡Son tan "ricos" ellos!
Pero no fue así, ya que, como queda dicho, un día o dos después volvió a poner la agilidad de su verbo al servicio de sus farragosos pensamientos, los cuales, por otra parte, no sabemos si son suyos o si se los dictan sus "amos". Muy ofendido por el hecho de que Rubalcaba hubiera publicado sus declaraciones de la renta y estas mostraran unos ingresos muy inferiores a los de su "Amo" supremo, quiso demostrarnos que en el hipotético caso de que los dos personajes hubieran seguido sus profesiones particulares, el Marianico, Registrador la Propiedad, hubiera generado muchos más ingresos que Rubalcaba como Químico, o Catedrático de Química...¡toma ya! no querían ustedes "perlas", pues hay tienen para hacer un rosario. Si las comparaciones, dicen, suelen ser odiosas, lo son más en este caso, en el que todo el mundo sabe las diferencias existentes entre ambas profesiones y el trabajo que requiere su dedicación a las mismas, ya que mientras los miembros de la primera, he conocido muchos Registradores, se limitan a firmar lo que sus oficiales le presentan, los Quimicos se suelen dejar sus pestañas en los Laboratorios...¿que los Registradores ganan más? eso no demuestra nada más que cuales son las metas iniciales de cada uno de ellos, por no hablar de lo injusto de las cosas.
Y el caso es que nuestro personaje , el encorbatado Carlos Floriano, para mí, desde hoy, el Florianin, iba de "chico listo", licenciado y doctor en Derecho, terminó la carrera con varios premios extraordinarios y matriculas de honor en su historial académico, aunque, siguiendo su ejecutoria, más le hubiera valido seguir con sus Carreras que adentrarse en los vericuetos de la política, ya que en ella, como es evidente, no ha cosechado nada más que fracasos: Derrotado, en su tierra extremeña, en las ocasiones en las que optó a la presidencia de la Comunidad, logró, por fin su acta de Diputado, desde la cual su Partido le aupó a la meritoria tarea de hacer el ridículo, tanto en nombre propio como en el de su formación...Posee, eso si, un aguerrido sentido de su misión y lo luce en cuantas ocasiones tiene oportunidad. Tarea que comparte con sus compañeros militantes del Partido Popular, Gonzalez Pons y Hernando, llegando, en ocasiones, a un autentico pugilato por saber quien dice la "chorrada" más gorda.
¡Ah! Y que conste, a mi personalmente los tres personajes citados me caen bien y me dan, a la vez ocasión, de divertirme escribiendo sobre los mismos...de animadversión nada, simpatía y además de la buena...¡Son tan "ricos" ellos!
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