SIERRA MORENA Y SU LEYENDA.
Sí, debía de robarse mucho y bien en aquella Sierra para que su nombre quedara grabado en la simbología popular unido a la palabra "robo",. "A robar a Sierra Morena" he oído decir en mi vida cientos de veces, cada vez que alguien ha querido alargarse de más en el cobro de alguna prenda, o se le ha visto meter la mano en bolsa ajena. Sin duda, aquellos bandoleros, los unos generosos, los otros no tanto, dejaron su "impronta" en aquellos parajes y hasta es posible que alguno de ellos dejara no solo su sangre, si no también su vida.
Sin duda aquellos bandoleros eran unas autenticas "antiguallas"; hoy, está claro, no hay que "airearse" en Sierra Morena, ni arriesgarse para nada y aunque algunos no se dejen patillas, pero si barba, basta con un dedo, sin duda mágico, que le sitúe tras una mesa de despacho y le otorgue el "don" de dictar decretros...y a partir de ahí "ancha es Castilla", haciendo lo que le da la real gana. Leemos, cada día, númerosas hazañas de estos auténticos "bandoleros de "guardarropía" y son tantas las que se producen que ni da tiempo a conocerlas todas, ni muchisimo menos a comentarlas, pero algunas, por sus circunstancias, nos producen peor olor que otras; vamos con una que se ha conocido en estos días, cuyo protagonista es, ¡faltaría más! la Comunidad Valenciana y sus nunca "bien" ponderados dirigentes. Su Consellería de Bienestar Social dispone de una amplia red de Residencias concertadas, posiblemente pasan de las cincuenta, de verdad que no las he contado, del mismo modo que tampoco me he metido en averiguaciones sin son todas o no de los mismos dueños, aunque no le debe de faltar mucho; el caso es que estos Centros, aunque disponen de plazas privadas, ocupan la mayor parte de las mismas con las que se denominan "Plazas Públicas" que otorga la citada Cosellería, previos una serie de requisitos a los que ha de someterse el solicitante o, en muchos de los casos, los familiares de los mismos. Hasta aquí todo está bien, pero "desmenucemos" uno de estos ingresos, con un caso totalmente imaginado, pero que no dista mucho, pueden comprobarlo, de la triste realidad.
Tenemos un Pensionista, en la mayoría de los casos con una enfermedad más o menos "intratable" por parte de la familia, que un día decide solicitar una de estas Plazas Públicas. La pensión del presunto solicitante es de 500 Euros., de la cual el Centro cobra hasta un ochenta por ciento, por lo que al Pensionista le queda el veinte por ciento restante, que traducido a dinero son cien euros; si lo traducimos a anualidades y le sumamos las dos Pagas Extras de la que todo pensionista dispone, elevamos la cantida a Dos mil Doscientos euros, capital que el acogido, la familia o en muchos casos el Centro administra para atender a gastos extras que siempre se producen, ropas, Médicinas no acogidas al Régimen de la Seguridad , pequeños vicios, que también los hay, sillas de ruedas, si las necesitara etc. Se lo he oído a ellos mismos: cuando tienen una necesidad, se dirigen "al mostrador", dicen ellos, y piden, si hay se les da y...hasta otra. Insisto, la mayoría de estos ingresados "ni saben ni pueden administrarse por ellos mismos". Es obvio el decir que las Residencias son privadas, que las mismas fijan su precio por plaza, que dicho precio lo paga el Pensionista, como he dicho, con el ochenta por ciento de su Pensión y que lo que falte hasta el importe fijado por el Centro corre a cargo de la Generalidad.
Durante las pasadas Fiestas los señores que nos gobiernan, al menos eso dicen ellos y nos "esquilman" a la vez, digo yo, en la Comunidad Valenciana, han promulgado un Decreto por el que, a partir del mes de Enero los recibos que el Centro, la Consellería, emita serán catorce en lugar de los doce que venía cobrando, divididos los cobros en doce mensualidades y dos extras, en los meses de Junio y Noviembre, con lo cual pocos calzoncillos, por decir algo, podrá comprarse nuestro sufrido protagonista con los Doscientos ochenta euros que le quedan para todo el año...¡Es muy triste, señores! tanto que yo, que suelo tratar estos temas con un poco, bastante. de ironía, en este caso no me voy a permitir ni el más leve asomo de la misma. Y saben ustedes lo que más me entristece,pues es muy sencillo, me apena y mucho que la medida , como todas las que está tomando esta "gentuza" ha sido tomada con premeditación y alevosía, basándose en su mayoría absoluta y disparando contra uno de los núcleos más desfavorecidos de la Sociedad, gentes, la mayoría en silla de ruedas, desprotegidos y muchos sin familia...y mientras, el Presidente del Gobierno, haciendo una turné triunfal por Europa y América, presumiendo de haber vencido la crisis, será la de los banqueros, valiéndose de ruedas de prensa preparadas.
Hoy mi Grito no termina con la formula habitual y sí poseído del un gran dolor, el de ver como estos gobernantes, que se ciernen sobre nuestras cabezas, se ceban con la parte más desprotegida, los viejos, los inválidos y todos aquellos que por cualquier circunstancias, física o metal, no pueden valerse por si mismos...Si la resolución de la Generalidad Valenciana no es un atraco, ustedes me dirán que es.
Tenemos un Pensionista, en la mayoría de los casos con una enfermedad más o menos "intratable" por parte de la familia, que un día decide solicitar una de estas Plazas Públicas. La pensión del presunto solicitante es de 500 Euros., de la cual el Centro cobra hasta un ochenta por ciento, por lo que al Pensionista le queda el veinte por ciento restante, que traducido a dinero son cien euros; si lo traducimos a anualidades y le sumamos las dos Pagas Extras de la que todo pensionista dispone, elevamos la cantida a Dos mil Doscientos euros, capital que el acogido, la familia o en muchos casos el Centro administra para atender a gastos extras que siempre se producen, ropas, Médicinas no acogidas al Régimen de la Seguridad , pequeños vicios, que también los hay, sillas de ruedas, si las necesitara etc. Se lo he oído a ellos mismos: cuando tienen una necesidad, se dirigen "al mostrador", dicen ellos, y piden, si hay se les da y...hasta otra. Insisto, la mayoría de estos ingresados "ni saben ni pueden administrarse por ellos mismos". Es obvio el decir que las Residencias son privadas, que las mismas fijan su precio por plaza, que dicho precio lo paga el Pensionista, como he dicho, con el ochenta por ciento de su Pensión y que lo que falte hasta el importe fijado por el Centro corre a cargo de la Generalidad.
Durante las pasadas Fiestas los señores que nos gobiernan, al menos eso dicen ellos y nos "esquilman" a la vez, digo yo, en la Comunidad Valenciana, han promulgado un Decreto por el que, a partir del mes de Enero los recibos que el Centro, la Consellería, emita serán catorce en lugar de los doce que venía cobrando, divididos los cobros en doce mensualidades y dos extras, en los meses de Junio y Noviembre, con lo cual pocos calzoncillos, por decir algo, podrá comprarse nuestro sufrido protagonista con los Doscientos ochenta euros que le quedan para todo el año...¡Es muy triste, señores! tanto que yo, que suelo tratar estos temas con un poco, bastante. de ironía, en este caso no me voy a permitir ni el más leve asomo de la misma. Y saben ustedes lo que más me entristece,pues es muy sencillo, me apena y mucho que la medida , como todas las que está tomando esta "gentuza" ha sido tomada con premeditación y alevosía, basándose en su mayoría absoluta y disparando contra uno de los núcleos más desfavorecidos de la Sociedad, gentes, la mayoría en silla de ruedas, desprotegidos y muchos sin familia...y mientras, el Presidente del Gobierno, haciendo una turné triunfal por Europa y América, presumiendo de haber vencido la crisis, será la de los banqueros, valiéndose de ruedas de prensa preparadas.
Hoy mi Grito no termina con la formula habitual y sí poseído del un gran dolor, el de ver como estos gobernantes, que se ciernen sobre nuestras cabezas, se ceban con la parte más desprotegida, los viejos, los inválidos y todos aquellos que por cualquier circunstancias, física o metal, no pueden valerse por si mismos...Si la resolución de la Generalidad Valenciana no es un atraco, ustedes me dirán que es.
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